La agenda sostenible se ha convertido en parte fundamental de los programasde desarrollo de Estados y empresas. Y en este marco, la protección de losrecursos hídricos es un capítulo elemental. ¿Pero cómo financiar iniciativas depreservación y ahorro? Es ahí donde entran en acción los bonos azules".

Los bonos azules son herramientas financieras de emisión de deuda quetienen como objetivo proteger los océanos y los ecosistemas marinos a través desu preservación. A través de ellos se ponen en marcha infraestructuras para eltratamiento y la gestión del agua o se adoptan medidas para preservar labiodiversidad marina.  

Su funcionamiento es similar al de los bonos verdes, cuyo éxito ya ha sido comentado en otro artículo de Agenda 2030.lat. En este caso, la toma de deuda tiene la condición de que el dinero obtenido debe ser invertido en planes de ahorro hídrico, protección de reservorios hídricos o cuidado de la fauna y flora acuática.

Proteger el agua en América Latina

América Latina cuenta con alrededor del 31% del agua dulce disponible actualmente en el planeta. Y ya son varias las naciones que han desarrollado iniciativas orientadas a su preservación y al cuidado de la biodiversidad de ríos, lagos, lagunas y mares.

El rol de las entidades financieras es clave a la hora de financiar estas políticas verdes. En Colombia, una de las cinco naciones con mayor diversidad en el planeta, BBVA se convirtió en el primer banco del país en emitir bonos azules. Se trata de un primer tramo por 50 millones de dólares destinados a financiar proyectos de construcción de plantas de tratamiento de agua y alcantarillado, preservación de los océanos y protección de lagos, páramos y manglares.  

La elección de Colombia como beneficiario de esta partida no es casual. El país caribeño tiene en su territorio continental y marítimo seis nevados y más de 48.000 humedales, entre ríos, lagos, lagunas, ciénagas y arrecifes, según especificó la fundación ambientalista World Wildlife Foundation (WWF),

"Las finanzas azules son el área emergente en las finanzas climáticas que generan un mayor interés por parte de inversores, instituciones financieras y emisores a nivel mundial", dijo Alicia Ferrer, jefe de inversiones de la Corporación Financiera Internacional (IFC), entidad adscrita al Banco Mundial, durante la última Convención Bancaria realizada en Cartagena. Estas palabras hacen pensar que esta puede ser la primera de muchas otras inversiones privadas a desarrollar en la región en defensa de los ecosistemas acuáticos.