La Ciudad de Córdoba vuelve a despuntar como una referente para la economía circular en Argentina: el último sábado se celebró una nueva edición del Hospital de juguetes, una iniciativa que apuesta por la puesta en valor de juegos en desuso para ser donados a comedores y hogares de niños.

La reutilización de elementos es uno de los ejes claves de la economía circular. Los expertos aseguran que al darles una segunda vida a los objetos, se disminuye la necesidad de producir nuevos productos. En consecuencia, se reduce la cantidad de recursos naturales utilizados, la huella ecológica y la energía consumida en la fabricación.

La jornada en Córdoba fue organizada por el ente BioCórdoba para convocar a niños, jóvenes y adultos que quieran acercar sus juguetes en buen estado pero en desuso para que puedan ser reacondicionados y donados a diversas instituciones como comedores y merenderos.  La reparación de juguetes estuvo a cargo de integrantes de Scouts Argentina, de la Dirección de Sustentabilidad Inclusiva y la Escuela Municipal de Economía Circular (EMEC) y de diversos voluntarios que se acercaron para colaborar en el proyecto.  

Esta iniciativa tiene por objetivo promover la reparación de aquellos juguetes que se encuentran en desuso y a la vez reducir el volumen de residuos mediante el "Hospital de juguetes". Una de las metas es promover la cultura de las 7 R impulsando la Economía Circular como nuevo paradigma de producción y consumo.

Las siete R son las siglas de rediseñar, reducir, reutilizar, reparar, renovar, recuperar y reciclar.  Ellas forman parte de una propuesta más integral por medio de la cual todas las personas podemos preservar nuestro planeta, incentivando el desarrollo de la economía circular, como modelo socio productivo sustentable, ético e inclusivo.

Este proyecto se desarrolló en el marco de un evento sustentable y forma parte de los programas de información, concientización y sensibilización de carácter educativo que lleva adelante BioCórdoba a través de EMEC y también de la Dirección de Sustentabilidad Inclusiva. "Se trata de incorporar a través de experiencias lúdicas y recreativas, tecnologías y nuevas estrategias comunicacionales para generar sentimientos de pertenencia de los niños y jóvenes respecto a nuestra biodiversidad", señala Daniel Muñoz, vicedirector de la EMEC.